Mi Ausias March, 68
No es similar mi caso al del criado
que busca en su señor comodidades
-un techo en el invierno y un buen fuego,
o sombra y agua fresca en el verano-,
e ignora las virtudes del esfuerzo,
lo cual le desazona, pues le deja
un triste panorama de futuro,
sin visos de cambiar o mejorar su sueldo.
Así, ¿cómo podrá superar
la pérdida del bien acostumbrado?
Sólo al faltarle reconocerá
al hombre de valor a quien odiaba
y despreciaba, pero las lágrimas
-su única moneda, en adelante-
no bastarán jamás para comprar la sombra
ni el calor del bien perdido.
No. Soy mas bien quien recorre la noche
helada, sin hogar ni compñía,
clavando en la memoria de la nieve
las huellas de su desesperación descalza.
Siervo de señor que nunca fue vencido,
ni tuvo que dar cuenta de sus actos:
salvaje el corazón, y la mirada
abierta sobre el mundo, sin temores.
2 Responses to Mi Ausias March, 68
Deja una respuesta Cancelar la respuesta
Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.
Hola, soy Alberto. !Bienvenid@ a mis páginas personales! Aquí encontrarás sobre todo Literatura y Comunicación en diversos soportes: textos, imágenes, música, voz… Si quieres orientarte antes de navegar, ve a la página de Indice / Guía en la pestaña superior principal. ¡Pásalo bien!
¿Buscas algo en concreto?
Secciones del Blog
- Hemeroteca(1)
- Literatura(431)
- En prosa(202)
- Mini(30)
-
- Vida Invisible(6)
- Artículos(97)
- 53 Fábulas(6)
- Frases Perversas(8)
- Crítica literaria(57)
- En verso(223)
- 2013(14)
- 2014(15)
- 2011-2012(33)
- 2015(7)
- 2016(3)
- Bulevares(29)
- Constelaciones(13)
- Alcala(11)
- Sonetos Imposibles(17)
- Sonetos Educados(7)
- Mi Ausias March(12)
- Mi Biblioteca(19)
- Política(8)
- Portada(292)
- Notas, Reseñas, Ideas(276)
- Comunicación y Medios(114)
- Viajes(54)
- Imágenes(37)
- Música(43)
Lo más reciente
- Kafka, de Pietro Citati
- Cancelación, Ovidio, Destierro
- Picasso inmersivo
- Conspiracionismo y apocalipsis
- King Kong, Polifemo, Savater.
- Todos contra todos, y sálvese quien pueda.
- Pietro Citati y la metafilología
- Superhéroes persas: «El Libro de los Reyes», de Firdusi.
- Historia Natural, de Plinio el Viejo
- La poética del siglo XX
Recibe los nuevos artículos y novedades en tu e-mail
En twitter...
Loading tweets...
Reportarte: mi empresa
REPORTARTE en Facebook
Perfil Profesional
En este blog encontrarás…
arte audiovisual Ausias March Bagan Birmania ciencia Cine comunicacion Contenidos Digitales economia España eventos filología Fotografía Frases Perversas internet Lago Inle literatura Literatura Fantástica madrid Mandalay marketing mediterraneo musica Myanmar Novela Pablo Neruda Periodismo Poesía poesía española contemporánea Poesía Experimental política publicidad Publicidad Online Rangoon Redes Sociales television textos de viajes Textos Originales Traducciones turismo twitter viajes video webtv
Cuando tu me diste amparo no era mas que una gitana
con un traje de volante y una enagua armidoná
y me vi por tu cariño, de la noche a la mañana,
convertía en una reina de brillantes coroná.
Pero a mi desde el principio me cansaba tu ternura,
me aqobiaba aquel encierro que me impuso tu pasión
y una noche que tus celos me colmaron de amargura
con la hiel de mis palabras, yo maté tu corazón.
Tanto decirme: «Te quiero… »
– Te quiero –
yo no lo puedo aguantá,
como un pájaro me muero
– me muero –
necesito libertá.
Abre puertas y cerrojos que me dé la lú der só.
que estan ciegos ya mis ojos de tinieblas y doló.
Por mi mare yo te imploro
y te lloro,
que no pienses más en mí;
no te quiero, no te adoro,
y no sirvo pa’ viví,
en una carcel de oro.
Y con prisas por dejarte yo me fuí por los caminos,
con mis coplas y mis sueños y mis ansias de viví
y ar momento mis volantes se enredaron entre espinos
y los nardos y las rosas fueron cardos para mí.
Der vinagre que ahora bebo la curpita es solo mía
y maldigo hasta la hora que probé la libertá.
Pordiosera de cariño te suplico noche y día
que en la carcel de tus brazos tu me vulvas a encerrá.
Vuelva a decirme: «Te quiero… »
-Te quiero-
Vuelve a decirlo por Dió…
sin oírtelo me muero
-me muero-
como un nardo sin oló.
Pa’ borrarte los agravios que te jise padesé,
si pudiera de mis labios me arrancaba hasta la pie.
Vale más que los tesoro
del moro
tu cariño para mi.
Por tu mare yo te imploro
que me encierre pa’ viví
en esa carcel de oro.
A una fragua yo me echara
pa salir purificá
si de nuevo tu en mi cara
te volvieras a mirá
La combinación de Ausías y la copla es algo que verdaderamente no se ha intentado aún!!