No permitas que tu melancolía cierre

los pasos del futuro, posibilidades nuevas.

Ten calma; si te ofende el mundo, sabe

primero modular tu dolor, aprende

a trazar explicaciones, diseña su causa;

reduce tu tristeza a la línea de la voz,

transfórmala en noticia, novela, rima,

en charla, comentario, y en silencio

después, y desde él

en risas, en jazmines, en encuentros,

en caras conocidas, en legítima leyenda.

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Indice de primeros versos